La ansiedad por estar conectados contrasta hoy con la imperiosa necesidad de descansar de los aparatos electrónicos y de dejar a un lado la vida virtual para enfocarse en la real.
Hoy estamos conectados con otros y desconectados de nosotros mismos. Por eso es importante
desenchufarnos para conectarnos con nuestro ser interior. Recuerda que somos fuente de energía, alegría y libertad.
La buena noticia es que no hay una única manera de desconectarse. No tienes que sacar un año sabático ahora mismo, ser una yogui experimentada ni ser el Dalai Lama. ¡Lo puedes hacer aquí y ahora!
¿Sabías que con 10 minutos diarios de desconexión mantendrás una alta capacidad de respuesta emocional, vital e intelectual? Empieza tu plan de desconexión ahora. La clave es buscar un lugar tranquilo donde puedas concentrarte en tu respiración.
Aquí te doy algunas ideas para desconectarte:
1. Muévete.
Baila, canta o haz ejercicio con música que te desconecte del entorno. De esta manera centrarás tu atención en la respiración, en el aquí y el ahora.
2. Medita.
Encuentra una posición cómoda, respira profundamente. Siente la vida y aquieta la mente durante el tiempo que puedas. En mi canal de Youtubeestán todas las meditaciones guiadas que he grabado para ti. ¡Sale una cada semana! Suscríbete para que no te pierdas ninguna.
3. Consiéntete.
Regálate un masaje; ve a un spa y dedícate a sentir. Conecta con tu respiración y desactiva la mente. Cuando “regreses” te sentirás como nueva. Tu mente estará en silencio y podrás concentrarte más.
4. Ten sexo.
Trasciende el enfoque del desahogo biológico. Entra en un tipo de sexualidad relajante, en la que expandes los sentidos, te tomas tu tiempo y te disfrutas a ti mismo tanto como al otro.
5. Alimenta tu alma con mensajes inspiradores (y construye los tuyos)
Busca lecturas que te lleven hacia el pensamiento positivo. Ve películas y series con historias inspiradoras (las biografías son una buena opción), sigue redes sociales que le aporten a tu cotidianidad y construye tus propias declaraciones con frases poderosas.
¿Tienes otra manera de desconectarte y hallar la paz interior?
Cuéntame en los comentarios.