Para evocar la luz divina, un estado de iluminación o el poder del fuego. Encender una vela tiene que ver con hacer consciencia de
tu guía espiritual o sabiduría superior. Y si hoy unes ese ritual al encuentro familiar y con demás seres queridos, abrirás una puerta para elevar los
valores y harás el mejor espacio para que el
amor se exprese.
Por eso hoy, 7 de diciembre, te comparto algunas ideas para hacer de
estos espacios de luz, momentos de renovación amorosa.
1. Ten presente una intención:
Si vas a invitar familia o
amigos para encender las velitas, o quizá vas de visita, ten presente cual es
la intención para encender esa luz y por la que quieres hacer tu encuentro con los seres queridos.
Conecta con tu intención y asegúrate de crear momentos gratificantes. Vive el
milagro de la creación, reconfórtate, danza en tu luz y olvida tus temores.
2. Busca el silencio.
Antes de encender las velas,
busca un espacio de silencio. Puede ser con tu grupo familiar o de amigos, pero
también puede ser para ti solo. En ese momento de silencio respira profundo
mientras visualizas mucha luz y tranquilidad para ti y los seres que amas. Siéntete
visible, como si fueras una esfera luminosa que brilla con la intensidad de su
mundo interior, crea calma, silencia tu turbulencia.
3. Sé su guardián.
Enciende tus velas con las personas que se encuentran a tu alrededor pero no pierdas de vista las tuyas. Incluso, puedes ponerles un mensaje, un valor o una pequeña marca. No pierdas la consciencia de lo que cada vela simboliza, no permitas que se pierda entre las demás o que se apague.
4. Reflexiona mientras está encendida.
Medita unos minutos. Sé concreto para poner en tu velita tu intención y tu compromiso, siembra en ella la perseverancia
para alcanzar tus deseos y, sobre todo, la humilde sabiduría para aceptar los designios
de la vida frente a ellos.
5. Comparte tu intención.
Si estas
compartiendo en familia o con amigos, una bonita forma de empezar a
materializar estos valores o deseos es poderlos compartir con libertad y
gratitud con los seres que te acompañan en esta linda experiencia de estar vivo.
Te abrazo desde mi luz y te deseo una noche
de velitas recargadas de las mejores experiencias.